Todos hemos oído hablar de las reacciones alérgicas al polen pero, ¿sabes en qué consiste realmente este fenómeno? ¡Descúbrelo!
- ¿A qué llamamos alergia?
La alergia es una reacción de hipersensibilidad inmunitaria a determinadas sustancias (alérgenos) que normalmente son inofensivas para el organismo. En el caso de la rinitis alérgica estacional, también denominada fiebre del heno o polinosis, esta se genera con distintas proteínas (como las albúminas y las prolaminas) presentes en los granos de polen de las plantas, los árboles y las flores.
- ¿Cómo reacciona nuestro cuerpo?
La respuesta del organismo frente a estos alérgenos es una inflamación de las vías respiratorias. Esta reacción se genera a través de unas células defensivas que liberan mediadores inflamatorios y desarrollan anticuerpos.
- ¿Quién puede sufrir de alergia?
El riesgo a desarrollar la rinitis alérgica tiene un factor de predisposición genética, aunque no es imprescindible para que se manifieste. También hay que tener en cuenta los factores ambientales, como la exposición a pólenes alergénicos. Suele manifestarse por primera vez en la infancia, aunque se concentra principalmente entre los 14-24 años, pudiendo hacerse crónica a lo largo del tiempo.
- ¿Cuál es la sintomatología?
Los síntomas más frecuentes de la rinitis alérgica son la obstrucción de las vías respiratorias, con picor y congestión nasal, lagrimeo y enrojecimiento ocular y tos seca persistente. También se puede llegar a desarrollar conjuntivitis, fatiga e incluso asma. Encontrarás una descripción más detallada de los síntomas en este post.
Ahora que ya conoces un poco más la rinitis alérgica, mantente alerta si sientes estos síntomas y descubre cómo prevenirlos siguiendo estos consejos. 😉 Y si quieres conocer aún más detalles, ¡consulta nuestro E-Book gratuito!
Autora: Dra. María Luisa Tamarit, Licenciada en Medicina y Cirugía (Colegiada en el Col·legi Oficial de Metges de Barcelona, Núm. Col. 22689)